En unos días, exactamente el 26 de marzo, se cumplirán 12 años de la muerte de Griselda Álvarez Ponce de León, la primera mujer gobernadora en la historia de México. Maestra y poeta que recibió el premio Sor Juana Inés de la Cruz en 1968, Álvarez ganó el voto popular para gobernar Colima en 1979, y en su discurso de toma de posesión pronunció la frase que marcaría su carrera política y feminista: “vivamos un tiempo nuevo de plena igualdad con los hombres, sin privilegios que no requerimos, pero sin desventajas que no merecemos”.
Cuatro décadas después, el tiempo nuevo del que habló Griselda Álvarez parece no haber llegado todavía, si tomamos en cuenta que apenas nueve mujeres han sido gobernadoras desde que se reconoció su derecho a votar y ser votadas en 1953. Además, solo siete de ellas fueron elegidas por la vía del sufragio, en tanto Dulce María Sauri (1991-1993) fue designada por el Congreso de Yucatán en sustitución de Víctor Manzanilla Schaffer, y Rosario Robles (1999-2000) se desempeñó como jefa de gobierno del Distrito Federal de forma interina.
El Dato…
9 Mujeres
Han sido gobernadoras en la historia de México, aunque solo siete fueron votadas
En víspera de las elecciones más grandes de la historia este año, en las que 15 estados cambiarán de gobernador o gobernadora, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) determinó que los partidos políticos deberían postular a siete mujeres y ocho hombres en sus candidaturas, a fin de cumplir con el principio de paridad.
La medida, que promovió el Instituto Nacional Electoral (INE), fue impugnada por el Senado, el Partido Acción Nacional y el morenista Alejandro Rojas, pero finalmente procedió. Asimismo, el TEPJF vinculó al Congreso de la Unión y a los congresos locales para que regulen la paridad en las gubernaturas hacia el proceso electoral de 2024.

Mientras tanto, los comicios del próximo 6 de junio serán una oportunidad para que más de 10 mil 500 mujeres accedan a cargos públicos, es decir, la mitad de los más de 21 mil que están en juego, dijo Anabel López Sánchez, directora general para una Vida Libre de Violencia y para la Igualdad Política y Social del Inmujeres, durante un encuentro virtual en febrero pasado. Sin embargo, su participación no solo será histórica como candidatas: el INE estima que hay 92.7 millones de personas en México con credencial para votar vigente, y de ellas, 51.7 por ciento —o poco más de 47 millones— son mujeres. Así, gran parte de la decisión también estará en sus manos.
Paridad en todo
A diferencia de lo que sucede con las gubernaturas, en el Poder Legislativo sí se ha visto un avance significativo hacia la paridad de género; basta ver los porcentajes de diputadas y diputados en la LV Legislatura (1991-1994): 8.8 por ciento contra 91.2 por ciento, mientras que en el periodo actual la relación es 48.2 por ciento mujeres y 51.8 por ciento hombres.
Por su parte, la integración del Senado de la República también cambió de manera importante a lo largo de dos décadas: en el periodo 2000-2006 solo 15.6 por ciento de la Cámara Alta estaba conformada por mujeres y el resto por hombres, mientras que en la actual legislatura el piso prácticamente se ha emparejado, con 63 senadoras (49.2 por ciento) y 65 senadores (50.8 por ciento).

Algo similar ha ocurrido en los congresos locales, donde las mujeres pasaron de ocupar 38.5 por ciento de los lugares disponibles en 2015 a 49.6 por ciento en 2020, si consideramos el promedio de todo el país. Esto equivale a 542 de mil 113 curules que hoy ostentan representación femenina.
El equilibrio en el plano legislativo se debe, en buena medida, a la regla de paridad de género que diversos sectores de mujeres y colectivos feministas lograron llevar a rango constitucional en 2014. De hecho, esto ha permitido que México sea el país con el porcentaje más alto de mujeres en los congresos entre los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), según datos del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
El Dato…
49.2 %
Del senado está compuesto por mujeres en la actual Legislatura LXIV
Sin embargo, el mayor avance se dio en 2019 con la reforma constitucional “Paridad en Todo”, que garantiza que la mitad de los cargos de decisión política en los tres niveles de gobierno (federal, estatal y municipal), los tres poderes de la Unión (Ejecutivo, Legislativo y Judicial) y organismos autónomos sea para mujeres.
“Pese a todo, se ganó la batalla épica por la paridad, la cual sacudirá y cambiará el sistema político mexicano con miras a la construcción de una democracia más justa e igualitaria”, escribió la investigadora Lorena Vázquez Correa, del Instituto Belisario Domínguez, en su artículo Reforma Constitucional de Paridad de Género: Rutas para su Implementación.
Hoy más que nunca se puede hacer realidad aquel tiempo nuevo del que habló Griselda Álvarez hace 42 años. Está en nuestras manos aprovechar las oportunidades que brinda la legislación, pues como dijo la expresidenta de Chile, Michelle Bachelet: “si una mujer entra a la política cambia la mujer; si muchas mujeres entran a la política, cambia la política.